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TUVE UN SUEÑO TAN REAL Por: Martha Hidalgo

 

Tuve un sueño muy hermoso. Soñé un día que había llegado a un pueblo muy bonito y era como en una fiesta patronal o algo así. 

Había banderines en las calles, mesas con souvenirs y recuerdo que en el sueño yo no tenía dinero y me decía: “¿Cómo puedo pagar si no tengo bolso ni dinero?”. Unas personas que estaban allí, muy amables me dijeron que podía llevar lo que quisiera, porque era gratis y me dieron unos objetos muy lindos. Yo estaba feliz en ese sitio, todas las personas eran muy amables. 

Luego, me fui para la plaza central y me senté allí, cuando llegaron tres ángeles con sus alas extendidas, blancas, y tenían escarcha dorada, con trajes largos y muy blancos. Pero, los ángeles eran niños, como de 6 o 7 años y empezaron a hacer una ronda y giraban y giraban y yo estaba encantada con eso.

Desperté, pero todo fue tan real, como si en verdad hubiera estado allí. ¡Fue tan hermoso mi sueño!






UN ÁNGEL A MI LADO Por: Martha Hidalgo

Esto sucedió luego del fallecimiento de mi madre hace veintidós años.

Me quedé un momento sola ese día y me dirigí hacia un grifo, estaba allí muy triste por la pérdida de mi mami, cuando sentí que alguien se puso al lado mío, muy cerca, y allí vi un hermoso ángel, con alas muy largas y blancas. Tenía su cabello largo y ensortijado de color ocre. No pude ver su rostro, pero estaba vestido con una túnica beige y un cinto, con sandalias tipo romano y, pues, me abrazó y sentí una paz y una tranquilidad enorme.

Esa fue una de mis experiencias con los hermosos ángeles y nunca la olvido. 

Imagen tomada de: Catholic.net-Santos Ángeles Custodios y Santos Arcángeles

UN SUEÑO CON MIGUEL ARCÁNGEL Por: Roberto Zavala

Mi nombre es Roberto Zavala de la Cruz, vivo en San Luis Potosí, México.

El día 24 de febrero del presente año, aproximadamente a las 6 o 7 de la mañana, tuve un sueño. Yo soñé que estaba en el patio de mi casa, era al amanecer, pero ya estaba claro el día y yo, desde allí, viendo hacia la calle, vi que venía algo a lo lejos. Conforme lo vi que se vino acercando, vi físicamente que era el Arcángel Miguel, volando como Supermán.

¡Muy grandote que estaba él! Muy alto, muy galán, con su cabello tipo amarillo entre lacio y ondulado. Y pasó volando exactamente desde el inicio de mi casa, hasta el final y pasó encimita de mí, como a unos tres metros de altura. 

Fue un sueño muy bonito, muy hermoso, pero se me hizo bastante real. ¡No podía yo creer, porque fue un sueño tan real, sentí bien bonito, sentí bien hermoso!

Soy devoto de él desde hace cuatro años, apenas he empezado a practicar las meditaciones y no dejo de rezarle. Le pido por todo: trabajo, salud, dinero, protección, etc.