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Libélulas I por Nancy Yaneth Perilla


Recordar cuando recibí la primera carta de mi ángel siempre me saca una sonrisa y un profundo suspiro.


La primera carta la recibí el 22 de noviembre de 2008, recuerdo que un par de meses antes de ir a recibirla, en el apartamento donde vivía, un día al levantarme en la ducha del baño encontré pegada a la pared una hermosa libélula. Al principio me asusté y traté de sacarla, pero finalmente sentí que no iba a hacerme daño y simplemente la dejé allí, aunque me pareció extraño que estuviera dentro de la casa. Posteriormente, como 15 días después, apareció otra en la tapa de la lavadora esa estaba muerta, pero era igual de bonita, azul.


Cuando llegué a recibir la carta de mi ángel me pareció muy curioso que en el apartamento donde vivían Giovana y Mauricio (Por la calle 80) en la pared de la sala estaba dibujada una libélula… Yo estaba bastante cargada con distintos temas y casi no pude preguntar de qué se trataba, pero Mauricio muy amablemente me ayudó con lo que el llamó “Un abrebocas de lo que sería una terapía de perdón” fue una experiencia muy bonita, me dejó gratamente sorprendida y al terminar sellamos la terapia con ese abrazo único, de esos que te envuelve el alma, mientras Giovanna escribía mi carta.


Al leer cada palabra me llenaba de emoción, rodaban algunas lágrimas por mis mejillas y no lograba entender cómo con solo mi nombre y mi edad, lograba hablarme como si me conocieran de toda la vida. Luego de eso, Mauricio me explicó que al ángel le gustaba jugar y que se manifestaba con un santo y seña, que yo fijé con él en ese mismo momento: las libélulas. Sentí que fue la forma de manifestarse, incluso antes de recibir mi primera carta, por supuesto me dijo su nombre: “Soy tu ángel y amigo del cielo Emmanuel”. 


Desde de esa primera carta han pasado 11 años y yo empecé a sentir su presencia, a hablarle mentalmente o en voz alta. Las libélulas, como esperaba, se hicieron parte de la vida cotidiana. De hace un tiempo para acá se han puesto de moda en aretes, collares, camisas etc. Sus manifestaciones han sido muchas, muy especiales y le han dado un maravilloso giro a mi vida con la ayuda de toda la Corte Celestial.


Gracias por abrir este espacio, porque hay muchas historias por contar…  



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